Rav Kalman Packouz zz"l
Para Reflexionar Juntos

La Importancia del Shmá Israel

El rabino Eliezer Silver (1882-1968) fue uno de los líderes del Comité de Rescate Judío durante el Holocausto. Después de la guerra visitó Europa como representante de la comunidad judía norteamericana, con el objetivo de ayudar en todo lo posible a los supe
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El rabino Eliezer Silver (1882-1968) fue uno de los líderes del Comité de Rescate Judío durante el Holocausto. Después de la guerra visitó Europa como representante de la comunidad judía norteamericana, con el objetivo de ayudar en todo lo posible a los supervivientes. 

Una de sus misiones fue recuperar a niños judíos que estuvieron escondidos durante la guerra en un monasterio. ¿Pero cómo harías esto? El responsable afirmó no saber diferenciar qué niños procedían de familias judías y cuáles no. 

El rabino tuvo entonces un destello muy interesante: le pidió al responsable que reuniera a todos los niños en una habitación y luego gritó: "¡Shemá Israel Ado-nai Elo-heinu Ado-nai Ehad!" Pronto se levantaron algunos niños, con lágrimas en los ojos, niños que se acordaban de sus padres y madres, que los acostaban y todas las noches recitaban el Shemá con ellos.

  El Shemá es una declaración de fe y una promesa de fidelidad a Dios. Impregna tanto la conciencia como la época judía.

 Como lo estudiamos la semana pasada, el Shemá se compone de 3 pequeños capítulos. El segundo verso del primer capítulo dice lo siguiente: “Y debes amar a Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todos tus bienes”. 

¿Qué significa amar a Dios con todo tu corazón? El Talmud explica que la palabra "corazón" es una metáfora de "deseos". Incluso hoy en día decimos a menudo: “Me encanta el chocolate”, es decir, “deseo el chocolate”. Cuando el versículo dice “Ama a Dios con todo tu corazón”, significa usar no sólo nuestras buenas características, como la bondad y la compasión, para llevar a cabo la voluntad del Creador, sino también usar nuestras características más 'rebeldes' para servirle.

 Por ejemplo: cuando vayas a un buen restaurante no lo hagas sólo para 'llenar la barriga'. Al contrario: tengamos presente que comemos para mantener nuestro cuerpo sano, para que podamos vivir y servir mejor a Dios. Asimismo, cuando compramos un CD de música, podemos hacerlo con la intención de ayudarnos a relajarnos y apreciar mejor el mundo que Él creó.

  ¿Qué significa “amar a Dios con toda tu alma”? Esto significa que debemos hacerlo incluso a costa de nuestras vidas. En todas las generaciones, los judíos prefirieron dar la vida antes que abandonar su religión. Ellos sabían y nosotros sabemos que hay algo más importante que la vida misma. Es muy importante vivir (y si es necesario, morir) con sentido, el sentido de santificar su sagrado Nombre.

  La parte final del versículo dice: “ámalo con todos tus bienes”. Esto es difícil de entender, porque cuando la Torá presenta una serie de cosas, normalmente lo hace en forma de progresión, de lo más fácil a lo más difícil. Aquí el orden sería: Ama a Dios emocionalmente (“corazón”), incluso dispuesto a dar tu vida por Él (“alma”), ¡e incluso si tienes que gastar tu dinero!?

 Si esto es una progresión, ¿realmente hay personas que consideran el dinero más importante que la vida misma? La respuesta es SÍ. El Talmud, en el Tratado Brajot (página 54a), relata acerca de un hombre que caminaba a través de un matorral lleno de espinas y se levantó los pantalones para que no se rompieran. Sus piernas terminaron cortadas y arañadas, ¡pero al menos se salvaron sus pantalones!

En el estado americano de Nevada (donde se encuentra Las Vegas) las apuestas son legales y cada hotel tiene un casino. Pero hay una cosa muy curiosa en su arquitectura: las ventanas del hotel están fabricadas especialmente para que no se abran más que una pequeña rendija, para que aquellos que pierden dinero jugando no se sientan tentados a saltar por la ventana. Sí, queridos lectores, para algunas personas el dinero es más importante que la vida misma.

 Hoy, en esta época turbulenta, cada uno de nosotros –hombres, mujeres y niños– podemos ayudar a nuestro pueblo de una manera sencilla, pero muy poderosa y eficaz. Cada mañana y cada tarde, tomemos unos 30 segundos de nuestra apretada agenda y recitemos el Shemá. Si no somos capaces de recitar los 3 capítulos completos, entonces que sea al menos la primera frase: “Shemá Israel Ado-nai Elo-heinu, Ado-nai Ehad”. Escucha Israel HaShem es nuestro Di-s, HaShem es UNO.

 Lo más importante es que entendamos y nos centremos en el significado de las palabras. Si no entiendes hebreo, también puedes recitarlo en castellano. Y luego fíjese el objetivo de aprender a pronunciar su transliteración, para que también pueda decirse en hebreo.

  Los padres pueden recitar el Shemá en voz alta con los niños. Es muy reconfortante para ellos tener un “ritual” nocturno de decir el Shemá, una oración para que el Todopoderoso los proteja, antes de irse a dormir. ¡Recitar el Shemá es una fórmula de seis palabras para unir a todas las personas amantes de la paz y traer más luz espiritual a nuestro mundo!



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